FASTIGINIA

Visualicemos un espacio en el que se han dispuesto mesas de mezclas, guitarras eléctricas, violines y percusiones electrónicas, labtops, pedaleras de efectos... . Una profusión de gadgets que predispone al espectador más a una sesión de DJ, o a un concierto de pop-rock o de rap, que a un recital poético-teatral sobre autores de los siglos dieciséis y diecisiete. Y es precisamente esta hibridación de lenguajes y formatos escénicos lo que hace de GóngoRap una propuesta única.

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Un proyecto que fusiona el texto clásico con formatos musicales contemporáneos. Puente tendido entre dos épocas, o mejor, juego de espejos enfrentados donde se reflejan expresiones artísticas a las que separan cientos de años y un abismo cultural. Nuestra tecnológica y banalizada sociedad está en las antípodas de un tiempo en que aún coexistían lo racional y lo mágico. Podrá discutirse la decisión de evocar las “Soledades” de Lope a ritmo de rap, la pasión de Villamediana sobre una contundente base techno, o el Polifemo gongorino inscrito en un minimalista soundscape. No obstante, esta experiencia acaso reafirma en la grandeza y atemporalidad del pensamiento hecho palabra de aquellos 'monstruos sagrados' que fluye con sorprendente naturalidad. 

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Frente a un panorama escénico dominado por la mercadotecnia y lo previsible, tribute bands y talent shows, en Fastiginia elegimos el riesgo como vía para provocar el sentimiento o la reflexión.